Buenos comentarios de Omar ...

Quintero, sin rencor. Carlos Arroyo es su amigo

Omar Quintero aceptó que no esperaba ser agredido por Carlos Arroyo, a quien dijo que le une una buena amistad.  (Juan Luis Martínez/META)

Raúl Álzaga / Meta

San Germán. México sorprendió a República Dominicana ayer y está en la final.

Eso implica la posibilidad hoy de otro partido, donde el base mexicano Omar Quintero esté frente  al boricua Carlos Arroyo, con quien el pasado domingo protagonizó un agrio incidente donde ambos intercambiaron cachetadas. 

Sin embargo,  Quintero sostuvo que ya su altercado con Arroyo está en el olvido y que no anticipa otro encontronazo con él, si se da el duelo por el oro esta noche entre mexicanos y boricuas,  aunque sí saldrá a hacer lo que tenga que hacer para tratar de ganar la presea dorada.

 Puerto Rico jugaba anoche en la otra semifinal ante Islas Vírgenes.

“Me sorprendió lo ocurrido, pues hemos tenido amistad y siempre compartimos cuando nos hemos visto en otros torneos. Pero creo que todo fue en el calor del juego. Yo quería ganar y él también. Para mí, eso ya está en el pasado y si quiere, luego  nos vamos a comer juntos”, sostuvo Quintero, quien explicó que en caso de que hoy se diera la revancha, la defensa de él sobre los armadores boricuas tiene que ser lo más fuerte posible, pues ellos son el motor del equipo de Puerto Rico. 

“Arroyo y (José Juan) Barea son grandes jugadores y si les das una pulgada de espacio, te matan. No puedo darles ninguna libertad. Y al igual que ellos van a salir a tratar de ganar, nosotros también saldremos a dejar el pellejo por el oro”. 

Ésta será la primera ocasión que Quintero disputará una medalla dorada desde que lo hizo en el Centrobásket 2001 en Toluca cuando Puerto Rico se impuso por el oro. 

Además, sería la primera ocasión en que México va a una final en unos Juegos Centroamericanos y del Caribe desde 1990, precisamente, en México, cuando los aztecas les ganaron a los boricuas por el oro. 

“A pesar de no tener algunas de las estrellas, éste es un grupo bien unido que ha pasado por muchas dificultades y ha trabajado muy duro para estar aquí. Es un premio al esfuerzo colectivo y a la labor de nuestro dirigente (el español José “Pepe” Claros)”, dijo Quintero acerca del actual asistente del equipo Joventut Badalona en la liga ACB de España y que en un momento fue dirigente de la American University, en Bayamón. 

“Creo que hemos mejorado mucho con “Pepe” como dirigente. Nos exige mucha intensidad, nos saca todo en las prácticas y es muy exigente en la ejecución de todos los sistemas que tenemos. Su mensaje es claro: hay que hacer todas las cosas pequeñas para ganar, sea el pase extra, el rebote clave, tirarte de cabeza al piso a buscar el balón suelto o encestar una canasta. Al final, todo se suma y el resultado es la victoria. Ahora -en el juego por el oro-  hay que repetirlo, volver a ser pacientes en nuestra ejecución a   media cancha y no caer en el juego de correcorre”.